Papa León XIV: este es el santo patrono que marcó su consagración agustina

El papa León XIV mantiene una profunda devoción por San Nicolás de Tolentino, el primer santo de la Orden de San Agustín. Así lo reveló el sacerdote misionero peruano David Farfán Guerrero en declaraciones a 'ACI Prensa', destacando que esta relación espiritual se remonta a los inicios de la vida religiosa del entonces Fray Robert Prevost, quien profesó sus votos perpetuos en 1981 y eligió a este místico italiano como su santo patrono.

El vínculo se profundizó durante los años en que Prevost sirvió como Obispo de Chiclayo (2015-2023). Allí, descubrió una pequeña capilla dedicada a San Nicolás en el centro poblado de San Nicolás, en el norte del Perú, donde solía orar en privado frente a una imagen del siglo XVII atribuida a los primeros agustinos que llegaron a la región.

“Este lugar es muy especial en la vida de Su Santidad, porque aquí es donde, como yo suelo decir, ‘ponía a prueba sus rodillas’”, señaló el P. Farfán, párroco en Zaña desde hace una década. La imagen venerada es considerada la más antigua de Zaña y, según el restaurador que la intervino, tiene más de 450 años.

Durante su etapa en Perú, el hoy papa también organizaba peregrinaciones de novicios agustinos hacia la capilla desde el distrito de Guadalupe, en un trayecto de más de 90 kilómetros, que incluía localidades con histórica presencia agustina como Pomalca y Tumán.

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Adoptar un santo patrono es una tradición común en las órdenes religiosas, en especial durante la profesión de votos. En este caso, San Nicolás de Tolentino, quien vivió entre los siglos XIII y XIV, fue elegido por su vida de oración, austeridad y servicio a los más necesitados. Es reconocido como patrono de las almas del purgatorio y fue canonizado en 1446 por el Papa Eugenio IV.

Esta devoción privada del papa León XIV coincide con los mensajes que ha pronunciado desde su reciente elección como Sumo Pontífice. El pasado domingo, durante su primera aparición pública en la plaza de San Pedro para el rezo del Regina Coeli, hizo un llamado a los jóvenes a seguir una vida consagrada.

“La Iglesia los necesita”, afirmó León XIV, quien instó a las comunidades a acoger, escuchar y acompañar el discernimiento vocacional. El mensaje fue emitido en el marco de la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, celebrada anualmente el cuarto domingo de Pascua.

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“¡No tengáis miedo, aceptad la invitación de Cristo Señor!”, exhortó, subrayando la importancia de contar con “modelos creíbles de entrega generosa a Dios y a sus hermanos”.

Ese mismo día, el Papa también pidió un alto al fuego “inmediato” en la Franja de Gaza, abogó por ayuda humanitaria para la población civil y exigió la liberación de todos los rehenes israelíes, en un mensaje desde el balcón central de la Basílica de San Pedro.

Según 'ACI Prensa', el entonces Mons. Prevost jamás imaginó que en la diócesis que pastorearía encontraría una comunidad y una capilla dedicadas a su santo patrono. Sin embargo, este hallazgo fortaleció su vínculo espiritual y, como recuerda el P. Farfán, era común verlo rezar solo frente a la imagen histórica de San Nicolás de Tolentino, en un gesto de recogimiento y fidelidad a su vocación.

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Así, la figura del santo agustino, conocido por su vida austera y caritativa, continúa siendo una referencia en la espiritualidad del Papa León XIV, quien ahora desde Roma, y en medio de grandes desafíos pastorales, mantiene viva esta devoción silenciosa que lo ha acompañado durante más de cuatro décadas.

SOFÍA ARIAS MARTÍNEZ

REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL

EL TIEMPO