Policrisis

Sobre la policrisis escribió su columna Edgar Morin, en Le Monde; y el término se usa cada vez más debido a que bien describe lo que hoy pasa en el mundo: guerras, genocidios, incapacidad del sistema multilateral para actuar, autoritarismos crecientes, sequías, pérdida de biodiversidad, microplásticos. Por otro lado, negacionistas climáticos que son elegidos presidentes mientras se conoce que en 2023 se rompieron todos los records.

Hoy se calcula que el 9 % de las personas (600 millones) viven fuera del “nicho” climático seguro. Deben migrar por falta de alimentos y agua y las altas temperaturas se han vuelto peligrosas. La policrisis es el estadio confluyente de todas las crisis, y ha empezado por estos años que avanzan hacia 2030, señalado por los científicos como el límite para hacer las grandes transformaciones que nos devuelvan a un mundo seguro y habitable. Vamos mal en el cumplimiento de los acuerdos internacionales. En un mundo cada vez más conectado, los factores de la policrisis nos obligan a modificar la forma de gestionar los desafíos.

El foro económico de Davos también identificó a la policrisis como el principal riesgo global. Si mantenemos la nefasta mezcla: inacción negación aplazamiento, comprometeremos el futuro de quienes hoy son niños. Un estudio reciente reveló que en comparación con quienes nacieron en 1960, los niños de hoy experimentarán 7,5 veces más olas de calor, 3,6 veces más sequías, 3 veces más pérdidas de cosechas, 2,8 veces más inundaciones de ríos y 2 veces más incendios forestales.

Recomiendo leer el informe de Unicef Prospects for children in the polycrisis. Los últimos años han sido más cálidos que cualquier otro momento en más de 125.000 años, no obstante, la demanda de petróleo aumentó a más de 100 millones de barriles día en 2023, la más alta de la historia. Desacelerar la economía del carbono, que es lo que hay que hacer, está lejos de concretarse. Si no actuamos antes de 2030 nos encaminamos a un mundo 3ºC más caliente. Ya vamos por 1.45ºC. Un tercio de la humanidad será migrante. Y qué escribe Morin ante todo esto: La primera resistencia es la del espíritu. Coincide con lo que alcanzó a escribir Ernesto Sábato en el año 2000: apresurémonos a recuperar aquello que de humanos hemos perdido. Inevitable preguntarse, una vez más: ¿y las universidades, qué están haciendo frente a la policrisis?

@GuzmanHennessey