Por: Pablo Zuloaga
Desde hace varias semanas han aparecido artículos en algunos medios de comunicación haciendo referencia al proyecto de renovación urbana Proscenio, el cual se desarrollará en tres manzanas de La Cabrera, zona de la que hacen parte los barrios El Retiro, Country y Chicó.
Este sector de Bogotá ha tenido cambios muy positivos durante las últimas décadas, convirtiéndose en uno de los más apetecidos de la ciudad. Su transformación comenzó con la renovación del parque de Cervantes a finales de los noventa, cuando unos vecinos visionarios resolvieron arrebatarlo de las garras de la indigencia y, a punta de aportes puerta a puerta y con el apoyo de la Fundación Compartir, lo convirtieron en lo que es hoy.
Esta experiencia le sirvió a la istración Distrital como ejemplo para renovar el parque El Virrey que, a pesar de tener unos pocos contradictores en su momento, llegó a feliz término y hoy día es un emblemático pulmón verde que une la carrera séptima con la autopista Norte. Luego, don Pedro Gómez lideró un grupo de vecinos que hicieron lo propio en el Parque de la 93.
Situación similar se viene ahora con Proscenio, una oportunidad para mejorar tres manzanas comprendidas entre la calle 85 y la 88 entre carreras 15 y 13A, en el mencionado sector de La Cabrera. Sin embargo, la iniciativa viene siendo atacada desde hace unos meses por unos pocos residentes que dicen representar a la comunidad, en contra de los deseos de la mayoría de vecinos. Dichos ataques, aparentemente, defienden intereses particulares con base en desinformación y miedo. En este sentido, es necesario aclarar que la mayoría de vecinos y propietarios de predios del sector estamos a favor de este proyecto, que –sin duda– le dará una cara amable a una zona que se ha visto azotada por la prostitución, el microtráfico, el vandalismo y la delincuencia. Es indudable que la inseguridad actual disminuirá con la transformación del sector.
Según los planes presentados, se atenderán las problemáticas más destacadas que interesan a los vecinos: seguridad, aspecto al que ya nos referimos; cultura, espacio público y movilidad.
En el aspecto cultural, se construirá un auditorio comparable al del Teatro Julio Mario Santo Domingo, con la respectiva dotación para una oferta cultural necesaria en la zona, donde podremos disfrutar de espectáculos del más alto nivel.
En cuanto a espacio público, se mejorará y ampliará la oferta en las tres manzanas, pues el proyecto contempla la construcción de plazoletas, un escenario deportivo y bulevares peatonales que interconectarán el parque El Virrey con la calle 85 y el parque León de Greiff, mediante la peatonalización de la carrera 14.
Sobre el tema de movilidad, se diseñarán y construirán los más modernos sistemas de parqueo con ubicación de talanqueras al interior de los sótanos, evitando así la congestión vehicular en las vías de . Igualmente, se ampliarán las vías circundantes para soportar la demanda del tráfico.
No podemos permitir que ahora unos pocos vecinos influyentes quieran atravesarse al proyecto, recurriendo a la desinformación por las vías de la confrontación mediática y judicial, y arrebatarnos a la gran mayoría la oportunidad de ver esa zona transformada.