SEÑOR DIRECTOR:
La inmigración puede ser uno de los problemas más graves hoy para la humanidad. Son millones las personas que deben dejar su país, como consecuencia de guerras, hambre falta de oportunidades. Europa lo padece todos los días. A Italia, por ejemplo, llegaron, solo este año, 31.000 personas. Nuestro país, aparte de que muchos colombianos se van por el llamado ‘Hueco’, arriesgando sus vidas, es territorio de paso.
Los inmigrantes en todo el mundo son explotados y tratados en forma cruel. Muchas veces pierden hasta sus hijos. Las grandes potencias piensan más en rechazarlos que en políticas comunes. Por eso debemos crear empleo y fortalecer el campo, producir mucha comida. Es desde el campo desde donde parten muchas personas en busca de mejor futuro, educación, oportunidades. Fracasan en las ciudades y luego buscan un sueño incierto en otros países. Lo hemos visto por muchos años. Hay que frenar la diáspora, es algo, al menos, con sentido humano.
Carmen Rosa Novoa
Chantaje para las reformas
SEÑOR DIRECTOR:
Como colombiano, me preocupa la decisión del Gobierno de pedirles la renuncia a 6 viceministros de los partidos Liberal, Conservador y de ‘la U’ por no apoyar la reforma de la salud, que la ciudadanía en un altísimo porcentaje reconoce que con unos ajustes -que el Gobierno ni siquiera los ha incorporado en su texto- destruiría los avances logrados en 30 años, que nos sitúan en el lugar 35 entre los 200 mejores sistemas del mundo. Este chantaje institucionaliza la ‘mermelada’. El Gobierno tendría luz verde para replicar el modelo y lograr en tiempos récord la aprobación de las reformas que inician el debate en los próximos meses. Las fuerzas vivas del país deben estar atentas a no permitir un atentado en contra de nuestra salud. Las elecciones de octubre beneficiarán a los partidos de la coalición por su postura de evitar este tsunami.
Gabriel Remolina Ordóñez
Psicoterapia para la tercera edad
SEÑOR DIRECTOR:
Al final del ciclo vital se presentan algunas dificultades psicológicas que es muy importante considerar. Entre las dificultades vitales que son específicas de la llamada tercera edad está la soledad, consecuencia de la muerte de seres queridos, la pareja, los padres, los amigos y muchas otras personas. Además, a los viejos se los aísla y no les es fácil hacer nuevos amigos. Otro problema importante en la vejez son los quebrantos de salud, inevitables y que exigen realizar cambios en el estilo de vida.
También los cambios en la imagen corporal, en hombres y en mujeres. La certeza de la brevedad del tiempo y de la cercanía de la muerte. Los cambios tecnológicos y sus exigencias, a las cuales muchos ancianos no se adaptan con facilidad. Todos estos problemas inciden en su salud mental y en su calidad de vida. La psicología está en mora de desarrollar un área de la psicoterapia centrada en los ancianos, específicamente orientada a esta creciente población, cada vez más numerosa y más relevante en la sociedad. Una psicoterapia que ayude a entender el mundo psicológico de los viejos, actualizar sus potencialidades y servir de guía en esa importante (e inevitable) etapa de la vida humana.
Rubén Ardila, Ph. D.
Psicólogo