Informe de Acnur revela que en Colombia 7 millones de personas han sido forzadas a abandonar sus hogares

Colombia figura entre los cinco países con mayor número de desplazados internos en el mundo, según el informe anual sobre tendencias globales de desplazamiento forzado, publicado por la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur).

El documento señala que alrededor de 7 millones de personas en el país han sido forzadas a abandonar sus hogares, una cifra solo superada por Ucrania, Afganistán, Sudán y Siria.

Desde la firma del acuerdo de paz en 2016, cerca de 1,6 millones de personas han sido desplazadas dentro del territorio nacional. Así lo informó Mireille Girard, representante de Acnur en Colombia, quien también destacó el impacto humanitario continuo que se registra en varias regiones. El desplazamiento no se ha detenido en la última década y evidencia que los factores de riesgo asociados al conflicto armado y la violencia continúan presentes.

Colombia no solo enfrenta una emergencia interna; también se ubica como el tercer país del mundo que más personas refugiadas acoge. Actualmente, 2,8 millones de venezolanos se encuentran en territorio colombiano, lo que posiciona al país después de Irán y Turquía en términos de recepción de población forzada a migrar. Esta dinámica ha ampliado los retos sociales, económicos y istrativos en distintas regiones del país.

La presencia de grupos armados ilegales mantiene activa la dinámica de desplazamientos y confinamientos forzados. Acnur identificó al menos 11 actores armados que inciden en estos fenómenos, principalmente en departamentos como Chocó, Nariño, Cauca, Valle del Cauca y el norte de Antioquia. Estas zonas registran altos niveles de violencia, restricciones a la movilidad y amenazas directas a comunidades.

Durante los primeros meses de 2024, más de 118.000 personas han sido víctimas de confinamientos en Colombia. La región del Catatumbo concentra gran parte de este impacto humanitario: 91.000 personas han sido afectadas, de las cuales 64.000 fueron desplazadas y 27.000 enfrentaron restricciones severas para movilizarse. Esta situación plantea desafíos adicionales a los mecanismos institucionales de respuesta.

Antioquia es uno de los principales destinos de población migrante y refugiada proveniente de Venezuela. El departamento alberga al 17 % de esta comunidad en Colombia, con una alta concentración en Medellín, donde aproximadamente el 10 % de los residentes migrantes son de origen venezolano. La representante de a indicó que 240.000 personas viven actualmente en la capital antioqueña, mientras que en todo el departamento la cifra supera las 400.000.

La mayoría de los migrantes venezolanos que residen en Colombia se encuentran en edad laboral activa. Los datos muestran que un amplio porcentaje se ubica entre los 18 y los 39 años, y que el 50,5 % de esta población corresponde a mujeres. Este perfil demográfico refleja una presencia significativa en sectores urbanos y una participación creciente en procesos de integración laboral y social.

En contraste con el aumento del desplazamiento interno, la migración irregular por la selva del Darién ha registrado una caída notable en 2025. Mientras en 2023 cruzaron medio millón de personas, la cifra cayó un 98 % este año, con solo 3.000 personas registradas en ese tránsito. Alrededor de 9.000 retornaron a Colombia desde Centroamérica, muchas de ellas con secuelas físicas y psicológicas derivadas del viaje.

La tendencia global en desplazamientos forzados muestra que la mayoría de las personas desplazadas permanecen dentro de sus países. A nivel mundial, el 60 % de los desplazados no cruzan fronteras. En el contexto americano, las causas del desplazamiento incluyen desde la violencia de pandillas en Haití hasta conflictos prolongados en Colombia.

El Director Regional de Acnur para las Américas, José Samaniego, advirtió sobre los efectos del desplazamiento en la región. Indicó que estos procesos tienen implicaciones relevantes para la estabilidad regional, pero también subrayó que varios países del continente han adoptado políticas de apertura y han logrado avances importantes en integración, protección y estabilización.

El informe global de Acnur también desmiente la idea de que los países ricos son los principales receptores de refugiados.

Contrario a esta percepción, el 67 % de las personas refugiadas permanece en países vecinos a sus lugares de origen. Además, el 73 % se encuentra en naciones de ingresos bajos y medios, lo que sitúa a América Latina como un actor clave en la gestión humanitaria del desplazamiento.

Redacción Justicia