Si todo resulta bien, a partir de abril, los conductores en Bogotá podrán pagar para no tener pico y placa por periodos de una semana o de un mes. El modelo, conocido como pico y placa solidario, funciona actualmente a término de seis meses y cuesta 2’066.200 pesos. En 2020, este sistema de cobro recaudó 6.100 millones de pesos, una cifra muy distante a la que había proyectado la istración anterior, que había estimado que en el primer año se podrían recaudar 170.000 millones de pesos.
Ahora, con un sistema de cobro más flexible, la Secretaría de Movilidad se plantea ajustar el modelo de cobro como parte de sus proyectos de 2021. EL TIEMPO conversó con el secretario Nicolás Estupiñán de este y otros proyectos que vienen para la entidad este año.
¿Cómo va el avance de las modificaciones al pico y placa?
Va bien. Estamos apoyándonos con una firma internacional. Antes teníamos un cargo fijo cada seis meses, la idea es bajarlo a periodos más cortos para poder llegara cobrar por viaje, por kilómetros. No estamos allá aún.
Pero sí hemos venido ajustando el proceso para cobrar por semana o por mes en la medida que las personas quieran hacerlo.
Estamos ajustando para no tener un cargo fijo. No puede pagar lo mismo un conductor de Renault 4 a una personas con un Mercedes último modelo. No puede ser lo mismo porque su capacidad de pago es diferente y porque queremos mejorar la calidad del aire, los carros más nuevos tienen mayor eficiencia de combustible y otro tipo de tecnología.
Supongamos que usted es el del Mercedes y yo el del Renault 4, ¿quién pagaría más?
Paga más el Mercedes, porque pesa más el avalúo del vehículo.
Esto es una transición para ir de pico y placa a cargos por congestión y por contaminación. Esta segunda fase, donde vamos reduciendo el tamaño del periodo, la vamos a implementar en abril y a finales de año vamos a entregarle estos elementos adicionales para incluir las características del vehículo y ver si ya podemos incluir las características del viaje.
¿Qué sería exactamente lo que pasaría en abril?
En abril empezamos a reducir la posibilidad de pagar por seis menes como única tarifa a pagar por semana y por mes y la posibilidad de agregarle el avalúo del vehículo.
Más adelante, a finales de año, (lo que haremos) es agregar los atributos adicionales: la cantidad de kilómetros que usted recorre y de la zona a la que va.
No es lo mismo si usted recorre 2 kilómetros a 15, y no es lo mismo si usted recorre esos kilómetros en una zona de poca congestión a una zona muy congestionada.
¿Cómo sería? ¿Yo pago esa semana por rodar a cualquier hora?
Exactamente. Y siempre teniendo la excepción del uso de movilidad compartida.
Si en abril yo llevo dos pasajeros más, ¿no tengo pico y placa?
No tiene pico y placa. Y no tiene que pagar.
¿No dispararía eso el uso del carro usado? Si me van a cobrar menos por un carro viejo…
A lo que le estamos apostando es a que los hogares que se compraron dos o tres carros para evadir el pico y placa, vendan estos carros y compren estos permisos.
Para yo pagar esa semana, ese mes de ese cupo para poder rodar sin pico y placa ¿va a ser sencillo o muy engorroso? ¿Puedo hacerlo en línea o cómo va a funcionar?
Usted entra a la página de la Secretaría y se va a encontrar con un video, que no se puede saltar, en el cual explicamos cuáles son las externalidades negativas que genera con su carro. Después de este corto video, tiene la posibilidad de pagar por PSE y esta plata entra directamente en línea a la Secretaría de Hacienda para fortalecer nuestro sistema de transporte público.
¿Cómo hace uno para que no le metan gol? ¿La Policía puede coger al azar cualquier carro y le aplica el detector para ver si pagó o no? ¿Esto va a a funcionar de una manera simple o se le va a complicar la vida a la Policía?
Tanto la Policía como las cámaras lo que tienen es un en tiempo real a una base de datos (...) de manera que se hace el cruce automático. Así (la autoridad) se da cuenta de que está exento y no pasa nada.
Hablando del SITP, ¿qué pasará con la tarifa?
La alcaldesa desde campaña planteaba (que) nosotros no vamos a aumentar la tarifa a toda la población y particularmente a la vulnerable hasta que no entendamos los efectos.
Tenemos como propósito este año dejar una política tarifaria sostenible.
¿Cuál sería la estrategia?
Vemos que los hogares vulnerables, pobres, se están gastando más del 32 por ciento de sus ingresos en movilidad. Dentro del Plan de Desarrollo quedó de objetivo que tenemos que bajar eso a un máximo de 15 por ciento.
Tenemos varias estrategias, pero la principal es tener una política integral que se ha hablado con la Secretaría de Hacienda, Planeación, Integración Social, de cómo podemos juntar los elementos que hay de apoyo en nuestra red de Bogotá Solidaria para redistribuir mejor lo que ya hay, para darles una mejor asignación a esos recursos.
¿Es un escenario donde se aumente el subsidio?
Para los hogares que los necesitan, sí. Hoy hay personas que utilizan TransMilenio de estratos tres, cuatro o cinco que, por ejemplo, podrían tener una tarifa más alta. Hay hogares más vulnerables y que necesitarían tener más apoyo.
¿Cómo va el Corredor Verde?
El 15 de marzo salimos con la licitación para lo que el IDU ha denominado la ‘ingeniería de valor’ para nuestras tres fases del corredor. Para poder iniciar construcción, el otro año.
¿Hubo modificaciones? ¿Sigue el cable del centro?
El cable del centro se va consolidando como una de las grandes adiciones a este corredor. La alcaldesa nos instó a generar esta solución que va a ser de integración de las localidades que están más arriba y es, sin duda, un elemento turístico.
Usted ha lanzado un Manual para el Peatón. A propósito... ¿sí tenemos la infraestructura necesaria para proteger al peatón?
Hay muchas quejas de los peatones por los ciclistas, por los informales y por y el estado de los andenes. Hay un Manual del Peatón, pero falta mucho para trabajarle a esa infraestructura. Creo que hay objetivos ambiciosos en el Plan de Desarrollo. Tenemos la meta de construir 4,2 millones de metros cuadrados de espacio público para el peatón. Además de eso, el año pasado ya nos dimos esas peleas, y avanzamos en la redistribución del espacio público.
Empezamos con la bicicleta (...) Este año es el del peatón, estamos en la Secretaría montando una campaña muy fuerte para recuperar el espacio público de los peatones, que parte por diseñar un manual. Se dan unas reglas claras del juego de cómo debemos comportarnos todos los actores de la vía. Vamos a ver cuáles son esas zonas de la ciudad que queremos intervenir primero.
¿Qué vamos a hacer con tanta bicicleta a motor que está surgiendo?
Tenemos unas mesas de trabajo con estas empresas de mensajería y de comercio electrónico, porque estamos viendo preocupante el incremento en estos vehículos. Efectivamente está prohibido. Una bicicleta de motor no puede ir por las ciclorrutas, entonces tenemos que diseñar una estrategia para que estas personas migren a otro tipo de elementos y a otro tipo de facilidades, pero nos toca trabajarlo con las empresas.
ERNESTO CORTÉS
EDITOR JEFE DE EL TIEMPO