Científicos han identificado que las neuronas que detectan los olores carecen de los receptores que el coronavirus utiliza para entrar en las células, lo que ha provocado un amplio debate sobre si pueden infectarse.
Esta nueva investigación, junto con estudios anteriores, ha probado que el coronavirus no infecta las células nerviosas de los olores, pero sí ataca a otras células de soporte que recubren la cavidad nasal.
El nuevo estudio se basa en investigaciones realizadas en el Instituto Zuckerman y el Centro Médico Irving de la Universidad de Columbia en Nueva York; la Facultad de Medicina Grossman de la Universidad de Nueva York; la Facultad de Medicina Icahn del Monte Sinaí en Nueva York; Baylor Genetics en Houston; y la Facultad de Medicina de la Universidad de California en Davis. La investigación se publicó en línea en la revista Cell a principios de febrero.
Los científicos examinaron hámsteres dorados y muestras de tejido humano de 23 pacientes que fallecieron a causa de covid-19. Después de infectar a los hámsteres con el coronavirus original, los científicos registraron el daño a sus sistemas olfativos a lo largo del tiempo.
Los expertos descubrieron que las células infectadas arrojan virus y mueren, mientras que las células inmunitarias inundan la región para combatir el virus. La inflamación subsiguiente causa estragos en los receptores olfativos, proteínas situadas en la superficie de las células nerviosas de la nariz que detectan y transmiten información sobre los olores.
El proceso altera la organización sofisticada de los genes en esas neuronas, provocándoles, en esencia, un corto circuito.
Su trabajo representa un gran avance en la comprensión del modo en el que las células que son fundamentales para el sentido del olfato se ven afectadas por el virus.
Los resultados de la nueva investigación aclararían la manera en que el coronavirus puede afectar a otros tipos de neuronas, dando lugar a trastornos como la “niebla mental”. También pueden explicar los mecanismos biológicos que subyacen al covid-19 persistente o prolongada, una serie de síntomas que persisten durante semanas o meses después del contagio inicial.
Más noticias de Salud