El expresidente Iván Duque habló de los tres acuerdos logrados en la Cumbre Concordia por la Amazonía, celebrada en el Esequibo. Además, habló sobre lo que debe aprender Colombia de Guyana. "Yo creo que ante los errores que ha venido cometiendo el actual gobierno, Guyana muestra que sí es posible tener un equilibrio entre lo que es exploración/explotación responsable de petróleo y gas y ser un país carbono negativo", dijo.
¿Qué fue lo que acordaron en la cumbre de esta semana del grupo de Concordia en Guyana?
En el marco de esta cumbre se acordaron tres importantes aspectos: Guyana se comprometió a duplicar las áreas protegidas del país de aquí a finales de 2025, a alcanzar la meta de al menos el 30 por ciento de su territorio con certificación legal de área protegida, y se comprometió a que en la reunión de los países más megadiversos del plantea se promoverá lo que es la gestión financiera en aras de proteger la biodiversidad.
Guyana ha estado en el debate climático por su megadiversidad, pero al mismo tiempo el enfoque de impulsar su explotación petrolera, ¿de qué se habló en este aspecto?
Guyana es un país que tiene la mayoría de reservas de petróleo en territorio marino, costa afuera; de hecho, es el mayor productor de petróleo per cápita. Aun produciendo a una cifra muy cercana a la de Colombia y duplicándola para el año entrante, sigue siendo carbono negativo porque tiene más del 95 por ciento de su territorio en selva tropical húmeda. Fuera de eso, Guyana lo que está haciendo es aprovechar una bonanza de materias primas, petróleo y gas, para avanzar en la transición energética y acelerar el desarrollo basado en la educación, en el capital humano, y basado en que este país se convierta en una especie de despensa para todo el Caribe ante la importancia de la seguridad alimentaria.
Según lo que usted dice, ¿puede ser un ejemplo para cómo debe darse la transición energética en Colombia?
Guyana es un país que hoy en día está produciendo casi 700.000 barriles de petróleo y el año entrante producirá más de un millón. Es un país que consume poco petróleo, en parte porque hay una estrategia nacional de crecimiento bajo en carbono. Consumen cada vez menos carbono porque están en un proceso de transición económica y energética. Lo que sí hace es que los recursos que vienen de este sector los quiere invertir estratégicamente en materia de capital humano, infraestructura y generación de empleos dignos. Lo hace con responsabilidad fiscal y sabiendo que será un país cada vez más importante para la seguridad energética de todo el hemisferio occidental.
De lo acordado en este foro, ¿qué elementos debe tener en cuenta Colombia?
Yo creo que ante los errores que ha venido cometiendo el actual gobierno, Guyana muestra que sí es posible tener un equilibrio entre lo que es exploración/explotación responsable de petróleo y gas y ser un país carbono negativo: han aumentado sus áreas protegidas, han fomentado el pago por servicios ecosistémicos y han hecho una verdadera lucha contra la deforestación. Tanto ha sido este esfuerzo que tienen una deforestación marginal, por debajo del 1 por ciento. Es un país que ha erradicado prácticamente la deforestación y lo ha hecho con una agenda de conservación. No han renunciado a la riqueza del subsuelo para derrotar a la pobreza.
Frente a la deforestación, ¿cómo ve la propuesta que lanzó el presidente Petro ante el Consejo de Seguridad de la ONU sobre la conversión hereditaria de los títulos en zonas selváticas?
El país más efectivo en la lucha contra la deforestación ha sido Guyana. Lo ha hecho porque han logrado coordinar la protección con la lucha contra los grupos armados, el crimen organizado y han empoderado a las comunidades indígenas. Se han generado soluciones de mercado basadas en la naturaleza. Es el país ejemplo de cómo se debe hacer una protección efectiva en una selva tropical húmeda. Creo que es la demostración de capacidad de ejecución y no la dialéctica populista que utiliza el medioambiente para ganarse aplausos, pero no le pone más recursos o interés prioritario a la agenda de desarrollo.
¿Cómo ha visto el desarrollo de la agenda del Gobierno en contra de la deforestación?
Se cometió un error habiendo desmontado la campaña Artemisa. Se cometió un error al tratar de facilitarle el camino a la ilegalidad con los ceses del fuego, las ventajas que ha tomado la ilegalidad son las que han permitido que se aumente la deforestación en el territorio. Se debe luchar en contra del crimen organizado con autoridad para proteger el patrimonio diverso de nuestro país y al mismo tiempo generar soluciones económicas para las comunidades a través del pago por servicios ecosistémicos.
La COP 16 se celebrará a finales de año en Cali, ¿tendrá repercusiones para Colombia?
Hemos sido reconocidos por la agenda de biodiversidad, hemos avanzado mucho en eso en nuestro gobierno. Creo que es importante que vengan los países para consolidar acuerdos. En materia de biodiversidad hay que resolver los temas de canje de deuda por acciones de protección de la biodiversidad y avanzar a créditos de biodiversidad y taxonomías de acción climática o de protección ecosistémica, y es importante la capacidad de disponer de más fondos para acceder los gobiernos a ellos para proteger las áreas más biodiversas. Eso es lo que esperamos, pero me preocupa que todavía la agenda de la COP no se conoce, hay lentitud, y ojalá no le vaya a salir mal a Colombia en términos de organización.
Veo que coincide con el presidente Petro en cambiar deuda por acción climática...
Más bien, él coincide conmigo. Esa iniciativa la lanzamos dentro de nuestro gobierno y apoyamos a países como Ecuador para que hiciera los primeros canjes, y después apoyamos para que países como Barbados hicieran lo propio. Lo que se busca es que en los países más endeudados, más pequeños y más vulnerables sean una herramienta efectiva que nos permita liberar recursos y destinarlos para conservación. Esa propuesta la planteamos desde 2018 y muchos países la empezaron a ejecutar en el 2021.
JUAN LOMBO
Redacción Política