Sarabia habla desde la Convención Bancaria del costo personal de las crisis políticas: ‘Soy humana, me equivoco’

En el marco de la 59.ª Convención Bancaria, que reúne a los líderes del sector financiero en Cartagena, se llevó a cabo este viernes el Voz de Líderes, un espacio moderado por la periodista María Elvira Arango. La conversación reunió a mujeres destacadas como Johana Bahamón, presidenta de la Fundación Acción Interna; Nancy Tueros, presidenta de Mibanco; Caterine Ibargüen, medallista olímpica; Marieli Alfonzo, gerente general de Roche Colombia; y Laura Sarabia, actual canciller.

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El , que giró en torno a los desafíos y aprendizajes de liderazgo femenino, tomó un giro personal cuando Sarabia —visiblemente conmovida— compartió el impacto emocional que han tenido en su vida los episodios de crisis, los señalamientos en redes sociales y el costo que ha pagado como madre, hija y hermana.

El momento más emotivo de su intervención llegó cuando relató la conversación que debió sostener con su hermana menor, Mariana, de solo 10 años. “Hace un mes me tocó explicarle por qué en las noticias decían que su hermana ‘satisfacía las necesidades’ del presidente Petro. Eso salió de la carta de un excanciller. Explicarle eso a una niña de 10 años fue muy difícil”, contó.

Sarabia, quien ha estado en el ojo del huracán en varios episodios mediáticos, itió sentir culpa por los sacrificios personales que ha debido asumir: “Siento mucha culpa por sacrificar tiempo con mi hijo, pero siempre vale la pena cuando llego a casa y me dice en una videollamada: ‘Te amo’”, dijo con la voz entrecortada.

Durante el , María Elvira Arango planteó a las participantes el tema del abuso y del trato al que muchas mujeres han sido sometidas en distintos entornos. Ante ello, la canciller se refirió brevemente al caso de Armando Benedetti: “Es un tema que he decidido abordar solo desde la institucionalidad. Ayer fue noticia este caso… nos saludamos por el bien del país y del trabajo, pero fue un episodio muy complicado. Creo que ninguna mujer debería vivir algo así, ni en la política ni en ningún espacio”, afirmó.

En cuanto a la manera en que ha enfrentado la exposición pública y los ataques en redes, Sarabia fue contundente: “Twitter es una cloaca. Ahí te pueden destrozar en 30 segundos. Trato de evitarlas, pero no puedo; sigo revisando los comentarios, y son muy duros. Mi mamá también los lee, y no es fácil”, lamentó.

Sobre cómo mantiene su fortaleza personal, la canciller afirmó: “Lo que me sostiene es lo que soy: madre, hija, hermana. Algunos me ven como la mano derecha del presidente, como canciller; otros conocen una Sarabia que no existe. La verdadera Laura es la que conocen mi padre, mi hijo y mi madre. No la que está en Twitter”.

Antes de concluir, dejó un mensaje claro sobre su humanidad detrás del cargo: “Laura se ha quebrado muchas veces. Soy humana, me equivoco, río, bailo, sigo siendo yo. Los funcionarios tenemos vida más allá de esto. Hoy ocupo este cargo; mañana, no sé. Pero siempre seré Laura Sarabia”.