SEÑOR DIRECTOR:
Una vez más, los resultados de las pruebas Pisa, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), no nos favorecen. El promedio de los estudiantes colombianos en las competencias que definen el estudio –matemáticas, ciencias y lectura– fue inferior a lo esperado, aunque los presupuestos gubernamentales para la educación se vienen incrementando.
Si las importantes inversiones que se hacen en el sector educativo no se reflejan en unos mejores resultados, nos preguntamos si el problema no está en los objetivos del currículo o pénsum académico y en la calidad de los docentes, la mayoría afiliados a Fecode. Es de todos conocido el rechazo de esta organización para que sus afiliados presenten evaluaciones que permitan establecer su real nivel de estructuración y conocimientos.
La mediocridad de los resultados en las pruebas Pisa no es un tema menor. El Gobierno debería darle la importancia que merece y establecer un plan de mejoramiento para que en las próximas pruebas tengamos un panorama distinto.
Mario Patiño Morris
Burlando los colados
SEÑOR DIRECTOR:
De nada sirvió colocar los nuevos torniquetes anticolados en algunas de las estaciones de TransMilenio. Un video que se hizo viral en las redes sociales, grabado en la troncal de la avenida Caracas, muestra a unos sujetos que para no pagar el pasaje se ‘trepan’ por el techo.
No solo se deben colocar estos torniquetes y puertas anticolados, se debe mejorar la seguridad dentro y fuera del sistema a toda hora, tiene que haber más servidores capacitados y presencia policiaca para sacar comparendos a estas personas, realizar monitoreos por medio de cámaras para identificarlas. Deben implementar más seguridad y control. Los vándalos no aprenden y burlan un medio de transporte que a muchos nos ha costado trabajo defender y cuidar.
Pido al alcalde electo, Carlos Fernando Galán, que tome medidas drásticas en TransMilenio y en el Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) para controlar a los colados.
Carlos Mauricio Restrepo Carreño
Seriedad en las conversaciones
SEÑOR DIRECTOR:
Mucho se ha discutido en la historia republicana acerca de los procesos que el Estado realiza con grupos al margen de la ley. Acuerdos como el del M-19 y la guerrilla de las Farc, aunque polémicos, fueron un trabajo conjunto de las autoridades del momento, respondiendo a la necesidad histórica que los aquejaba.
El diálogo es una manera eficaz de resolver los conflictos y salvar vidas. El verdadero inconveniente es la falta de voluntad de paz de grupos ilegales como el Eln. A todo aquel que no muestre esa asertiva decisión, lo más útil será -sin perder los principios básicos de los derechos humanos- combatirlos con toda la capacidad posible de la Fuerza Pública.
Sí, la paz es útil y son necesarias las conversaciones, pero si estas no se toman con la seriedad que corresponde a un cambio en todo el territorio del país, que no se arroguen los criminales el derecho a seguir matando y robando la tranquilidad de los colombianos, porque hay un Estado que se respeta y al que todos deben responder.
Andrés F. Correa Vega