La fruta amada por todos que ayuda a la concentración

Para mantener la mente en buen estado, los especialistas recomiendan seguir distintos consejos, y uno de los más importantes está estrechamente relacionado con los alimentos y las comidas que una persona ingiere. Estudios publicados recientemente demostraron que la frutilla influye notablemente en la concentración y los procesos cognitivos de la mente.

Desde que el humano comenzó a pensar, la mente, sujeta a siglos de estudios, se mantiene nimbada de misterio, con ciertos sectores que parecen inaccesibles para el conocimiento. No obstante, gracias al avance de las últimas décadas, distintos estudios demostraron la importancia de la alimentación para la conservación del cerebro en buen estado, y la frutilla es uno de los aliados más importantes en el proceso.

Un estudio publicado el año pasado por la Universidad Estatal de San Diego demostró que los compuestos polifenólicos de las fresas pueden mejorar la función cognitiva y la salud cardiovascular debido a sus capacidades antioxidantes. Esta fruta, consumida ampliamente alrededor del mundo, es uno de los alimentos que mejor influye en la concentración, aunque sus beneficios se extienden también hacia otros órganos del cuerpo.

De acuerdo a la información reunida por los investigadores, el consumo de frutillas reduce la presión arterial sistólica e impacta de manera significativa en el tiempo para la reducción de la circunferencia de la cintura. "Este estudio demuestra que el consumo diario de 26 gramos de polvo de fresa liofilizado mejora moderadamente la velocidad de procesamiento cognitivo, reduce la presión arterial sistólica y aumenta la capacidad antioxidante total, lo que potencialmente promueve la función cognitiva y mejora los factores de riesgo cardiovascular", escribieron en la conclusión los autores del estudio.

Más allá de la importancia de las frutillas, otros alimentos consumidos frecuentemente en distintas partes del mundo impactan notablemente en el proceso de concentración de los humanos.

Algunas de las frutas que tienen la facultad de mejorar la concentración son los arándanos y las frambuesas (por sus componentes antioxidantes), en tanto las verduras de hoja verde como espinacas, col rizada, lechuga romana, berros y repollo disminuyen la inflamación y favorecen la producción de energía en las células cerebrales.