¿Por qué habría fracasado designación de Biden para la embajada de EE. UU. en Colombia?

Ya pasó más de un año desde que el gobierno Joe Biden nominó a Elizabeth Manes como embajadora de Estados Unidos en Colombia. Su designación debía ser ratificada por el Senado de ese país, órgano encargado de confirmar la designación de diplomáticos, jueces y otros funcionarios.

Sin embargo, el periodo legislativo terminó a comienzos de este año sin que Manes fuese confirmada provocando una devolución automática del nombramiento a la Casa Blanca, donde ahora la istración Biden deberá barajar nuevamente las cartas para decidir qué hacer con el puesto en Bogotá.

En la sede diplomática en suelo colombiano esta hace casi dos años Francisco Palmieri, quien funge como embajador encargado desde que Philip Goldberg dejó el cargo a mediados de 2022.

Lo cierto es que todo apunta a que Biden no apostará nuevamente por Manes. De hecho la exembajadora en El Salvador ya fue nombrada en otro cargo que no requiere el visto Bueno del Congreso: desde comienzos de este mes es la nueva encargada de negocios de Estados Unidos ante la Unesco.

Manes, tras el nombramiento, se encontró con una fuerte oposición del Partido Republicano en la comisión de Relaciones de Exteriores del Senado donde impidieron que se agendara su audiencia de confirmación. En particular, del senador de la Florida Marco Rubio.

Desde junio del año pasado, el legislador había dejado claro que no apoyaría a Manes como nueva embajadora y sin su voto, dado la composición y reglas de la Cámara Alta era prácticamente imposible que avanzara.

"Después de una cuidadosa revisión y consideración de sus calificaciones y desempeño en puestos anteriores, no puedo apoyar la nominación de Jean Manes para servir como Embajadora de Estados Unidos en Colombia. La misión diplomática se encuentra entre las más importantes estratégicamente para los intereses tanto de nuestro país como para la estabilidad regional en el hemisferio occidental", dijo el Senador en ese momento.

Parte de la oposición a Manes entre los republicanos emana de sus años como embajadora ante El Salvador y su conflicto con el presidente Nayib Bukele, que tiene muy buenas relaciones con algunos de este partido.

Es incierto, a estas alturas, si Biden nominará a un nuevo candidato para embajador. Actualmente el proceso de confirmación en el Senado, incluso contando con la bendición de ambos partidos esta tardando meses dada la gran cantidad de funcionarios que aún esperan su turno.

Con la campaña electoral de por medio, ese proceso podría ser aún más lento y desgastante para un nuevo aspirante que, además, podría tener nuevo jefe a partir de enero del año entrante. Además, con el paso de los años, Palmieri se ha consolidado en su cargo. Lo cual ha reducido la presión por que se designe a un nuevo embajador.

En todo caso, dado que su cargo es interino y opera como encargado de negocios, sigue siendo polémico que EE. UU. no tenga a un embajador en Colombia con plenas facultades.

REDACCIÓN INTERNACIONAL Y WASHINGTON

EL TIEMPO