La primera impresión que tiene quien llega al parque Yurimena de la caja de Compensación Familiar Cofrem del Meta, es que la flora y la fauna son sus anfitriones directos.
Y esa sensación la confirma Lolita, un mono maicero hembra que de vez en cuando se pasea por los corredores del parque interactuando con los visitantes y recogiendo cuanto paquetico de dulces o golosinas dejen por ahí los turistas. Lolita estuvo amarrada durante años, la Corporación Cormacarena la rescató y ya adulta la llevó a Yurimena con el fin de liberarla; Quedó tan maravillada con el lugar que decidió no irse y más bien 'socializar’ con los humanos.
Y es que en Yurimena ofrece una reserva forestal hídrica y de fauna de unas 100 hectáreas (un área algo al Parque Simón Bolívar de Bogotá que mide 113 hectáreas). El parque, que en total tiene 150 hectáreas, también cuenta con senderos ecológicos, que pueden ser recorridos a pie, a caballo o en bicicleta.
Según Héctor Orlando Solano, director de Cofrem, ese paraíso llamado Yurimena permite al visitante tener una experiencia de total desconexión con el agite diario de las ciudades; el paisaje y el bosque, hacen sentir un acogedor abrazo de la naturaleza.
“Por eso siempre buscamos que los turistas tengan una experiencia rural donde interactúen con fauna, con animales domésticos, que tengan el avistamiento de animales en su hábitat natural. La estrategia es que, o bien los vea en el recorrido, o los vea en la transmisión en vivo y en directo de las cámaras ubicadas en distintos puntos del hotel”, explicó Solano.
Para poblar la reserva, Cormacarena ha liberado varias especies de animales como loros, tucanes, chigüiros, osos hormigueros, monos maiceros y venados que significan un enorme capital para el parque y que, por esa razón, tiene cámaras camufladas en la reserva que permiten monitorear sus conductas y rutinas. Ahí además se descubre qué nuevas especies llegan.
La a de Yurimena, Nancy Gutiérrez, cuenta que los turistas extranjeros quedan encantados con el verde de la naturaleza. “Hubo un francés que hizo caminata con la familia los tres días que estuvieron y vino un fotógrafo español con un equipo de cámaras espectacular que se levantaba muy temprano a hacer avistamiento de aves y quedó maravillado”, relata Nancy.
El parque planea tener una granja integral para generar el cuidado de algunas especies domésticas. Según el director Solano, como complemento se quiere involucrar una oferta académica con al menos dos programas de formación tipo internado donde los estudiantes de hotelería y turismo o guianza hotelera, puedan ir a aprender agroturismo.
Yurimena espera consolidarse y cumplir con una ‘promesa de valor’ que se tiene con el municipio vecino Puerto López y sus ciudadanos, y es que el parque llegue a representarles lo que Cafam es para Melgar o Piscilago para Girardot. “Que Yurimena se vuelva un referente nacional en recreación, que no tenga nada que envidiarle a Piscilago, a Cafam o a Panaca”, concluyó Solano.