Luego de que el Departamento istrativo Nacional de Estadística (Dane) diera a conocer ayer las cifras de desempleo con corte a junio pasado, que indican que este bajó a niveles de un dígito (9,3 por ciento anual), Leonardo Villar, gerente del Banco de la República, destacó ese comportamiento, más aún en medio de una desaceleración de la economía del país en ese primer semestre del año.
Al término de la séptima junta directiva del banco emisor colombiano, en la que por unanimidad de los se determinó dejar en 13,25 por ciento la tasa de intervención del mercado, el vocero de la entidad dijo que si bien los últimos datos que muestran mes a mes el desempeño de la economía no son muy alentadores, en materia de desempleo la situación es diferente.
“El indicador de seguimiento a la economía (ISE) para abril y mayo, al igual que la última encuesta de industria y comercio, sugieren que la desaceleración de la actividad económica en el segundo trimestre habría sido mayor a la prevista. A pesar de lo anterior, el mercado laboral ha seguido exhibiendo un buen desempeño”, señaló.
Por su parte, Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, destacó como positivas las cifras reveladas por el Dane y dijo que hay una importante creación de empleo y esto señala, a su vez, que existe una enorme expectativa frente a la recuperación de la economía.
“Lo que uno espera es que la reducción del empleo se presente con algunos retrasos en momentos en los cuales las tasas de crecimiento se reducen. Lo que hoy nos muestra este informe es que hay una reactivación en el mercado del trabajo, que los empresarios de distinto tamaño están contratando más personas y que en los trabajos por cuenta propia hay más personas que se incorporan a la actividad económica, lo cual corrobora que la expectativa de crecimiento del 1 por ciento con la que se inició el año ya va por el 1,8 y podríamos terminar en el 2 por ciento”, dijo Bonilla.
El gerente del Emisor también explicó que en la decisión del banco de dejar inalterada la tasa de referencia para el costo del crédito a la banca se tuvo en cuenta el hecho de que la inflación anual en junio se ubicó en 12,1 por ciento, un punto porcentual por debajo de la observada en diciembre de 2022, con lo cual “se continúa avanzando en el control de la inflación, lo cual se refleja en la evolución favorable de las expectativas”.
Sin embargo, Villar reconoce que no obstante esos esfuerzos, la inflación continúa en niveles altos con respecto a la meta (3 por ciento) y subsiste la rigidez de la inflación básica sin alimentos ni regulados al ubicarse en junio en 10,5 por ciento anual, nivel similar al que se observó en los meses precedentes, lo cual es explicado por la indexación de los precios.
El gerente del Emisor también llamó la atención sobre el comportamiento del crédito financiero, el cual está dando señales de desaceleración, comportamiento que se viene observando en los últimos meses, al tiempo que se ha producido un deterioro relativo en la calidad de la cartera.