Millonarios quedó eliminado muy rápido de la final de la Liga: a una fecha de terminar los cuadrangulares semifinales, el equipo que dirige Alberto Gamero empató sin goles contra Atlético Nacional y ya no tiene ninguna opción.
El miércoles, los azules visitarán al Bucaramanga para cumplir con el calendario y para tratar de sumar puntos para la reclasificación, que entrega al primero de esa tabla que no haya sido campeón de Liga o Copa Colombia un cupo para la fase previa de la Copa Libertadores 2023.
Los azules acumulan una nueva eliminación. ¿Qué pasó esta vez? Estas son las cinco causas de la eliminación.
Un equipo al que se le perdió el gol
Millonarios no fue un equipo de mucho gol en la fase todos contra todos (hizo 23 en 20 partidos), pero compensó eso con un buen trabajo defensivo. En los cuadrangulares, el problema para anotar se agravó: hizo cuatro goles, solo dos de ellos en jugadas elaboradas: el de Daniel Ruiz en Medellín, contra Nacional, y el de Jáder Valencia, contra Junior en Barranquilla. Los otros fueron un penalti y un autogol.
Errores defensivos puntuales y graves
La convocatoria de Juan Pablo Vargas le armó un problema grande al técnico Alberto Gamero en una línea que se había mostrado segura a lo largo del año. Probó con Andrés Murillo, pero cometió errores muy graves que le costaron puntos a Millonarios, en Medellín y en Barranquilla. Lo que se perdió como visitante le quitó a los azules la posibilidad de pelear hasta la última fecha.
Una nómina liviana y sin recambio
Millonarios tiene una titular fuerte, con un arquero que respondió bien, dos centrales seguros, un buen lateral izquierdo, una buena pareja de recuperación y dos creativos muy talentosos. Pero esos jugadores no tuvieron recambio. Y en otras posiciones sufrió: le faltó consolidar un lateral derecho, un extremo y el delantero en punta. Y los refuerzos extranjeros no respondieron. Eduardo Sosa tuvo altibajos y Ríchard Celis decepcionó.
Como local no funcionó en los cuadrangulares
Millonarios sufrió en todos los partidos como local. En el primero, contra Bucaramanga, aunque ganó, no jugó bien y el rival le puso bastante trabajo. Contra Junior se quejó de la pérdida de tiempo del equipo de Juan Cruz Real, pero tampoco tuvo la fórmula para romper una defensa cerrada. Y contra Nacional, que lo dejó jugar mucho más que Junior, pecó por falta de eficacia. Cinco puntos de nueve, pensando en la final, es muy poco.
Le costó con los grandes
Salvo Santa Fe y Cali, que tuvieron una mala campaña en el semestre, Millonarios sufrió en todo el año con los equipos históricos en la Liga. Ya Nacional le había ganado en la fase todos contra todos, perdió con América en el Pascual Guerrero, cayó frente al Medellín en un partido en el que estuvo en superioridad numérica desde los diez minutos y con Junior, en la fase todos contra todos, tuvo que esperar a la reposición para ganarle 1-0.
José Orlando Ascencio
Subeditor de Deportes
@josasc