Baba Vanga, nacida como Vangelia Pandeva Dimitrova, fue una mística y vidente búlgara. A pesar de haber quedado ciega en su niñez, se destacó por acertar en varias predicciones sobre eventos del futuro. Incluso, una de sus profecías fue el detonante de una expedición arqueológica.
En su libro 'Vanga: toda la verdad', Krasimira Stoyanova, sobrina de la clarividente, relató todo el suceso. Aparentemente, pocos minutos antes de su fallecimiento, el 11 de agosto de 1996, susurró una inquietante predicción.
"Llegará el tiempo de los milagros y la ciencia hará grandes descubrimientos en el campo de lo inmaterial. Seremos testigos de grandes descubrimientos arqueológicos que cambiarán radicalmente nuestra comprensión del mundo desde la antigüedad. Todo el oro escondido saldrá a la superficie, pero el agua se irá. Tan predeterminado", dijo.
Los antecedentes de la enigmática profecía
De acuerdo con el relato de la sobrina, hace más de 40 años se llevó a cabo una expedición en las montañas Strandza, en Bulgaria, con el fin de encontrar un presunto tesoro. La búsqueda había sido guiada por Lyudmila Zhivkova, hija del líder comunista búlgaro Todor Zhivkov, y basada en las predicciones de la 'Nostradamus de los Balcanes'.
El portal enfocado en arqueología e historia 'Ancient Origins', reportó que en enero de 1981, un hombre visitó a Baba con un viejo mapa que, según él, conducía a un tesoro. El problema era que el individuo no era capaz de descifrarlo, así que quería ayuda de la vidente.
La mujer le dijo que era falso y le dijo que fuera a relajarse en los termales. Mientras el hombre estaba ocupado, le pidió a su sobrina que lo copiara antes de que regresara.
Depsués, le confesó a Krasimira que el mapa no llevaba a un tesoro, pero sí contenía una antigua escritura egipcia.
“Hace mucho tiempo, gente de Egipto llegó por mar a tierras que ahora forman parte de Bulgaria. Cavaron profundamente para enterrar un sarcófago que contenía conocimientos ancestrales en una escritura desconocida. En el sarcófago está inscrita la historia de 2.000 años antes de nuestra era y 2.000 años después de nuestra era. Después de eso, todos los de esta expedición fueron asesinados para preservar el secreto sellado para siempre. Se derramó mucha sangre", le dijo Baba Vanga a su sobrina.
Luego le describió cómo era el lugar, en las montañas Strandza, con exactitud y detalles, a pesar de nunca haber ido y ser ciega. Recomendó ir el 5 de mayo, porque supuestamente favorecía a los cuerpos celestes. Dijo que había que esperar a los rayos del sol y luego los de la luna para ver algo.
Según 'Ancient Origins', Krasimira le compartió esta historia a Krastyu Mutafchiev, un confidente de Lyudmila Zhivkova. Le propuso organizar una expedición para encontrar el lugar descrito por Vanga.
La expedición basada en la profecía de Baba Vanga
Cinco exploradores fueron en busca del lugar en las montañas Strandza, el 4 de mayo. Llegaron a la ubicación que había dicho Baba Vanga y decidieron esperar.
"A la izquierda, en primer plano, había un hombre de pie que sostenía un objeto esférico en su mano derecha extendida. Un poco más arriba y a la derecha, había una segunda silueta. Un hombre estaba sentado en un trono, con los brazos a lo largo de los hombros. En el cuerpo llevaba un sombrero cónico en la cabeza. Había dos protuberancias a cada lado", describió Krasimira Stoyanova en su libro.
La advertencia de Baba Vanga
Stoyanova le contó la historia a su tía, creyó que se iba a alegrar de que sus predicciones fueran ciertas, pero no fue así. Dijo que todavía no era tiempo de explorar ese sitio.
Mientras tanto, Krastyu Mutafchiev le contó a Lyudmila Zhivkova sobre lo que habían presenciado. Ella tomó la decisión de continuar la expedición.
"Desafortunadamente, la expedición dio un giro trágico: Ludmila murió repentinamente pocas semanas después del inicio de la excavación. En los meses siguientes, varias otras personas tuvieron finales trágicos o fueron encarceladas, incluido el propio Krastyu Mutafchiev, que fue condenado a 10 años de prisión. También desaparecieron todos los documentos relacionados con esta expedición. No quedó nada. Krastyu Mutafchiev murió a principios de la década de 2000", indicó 'Ancient Origins'.
Las teorías y el presente
Krastyu Mutafchiev escribió y publicó varios libros con sus teorías. Creía que el sitio podía ver la tumba de la diosa egipcia Bastet. Su exesposa, Gergana Bakalova, dijo que tenía otros documentos que podrían dar más información sobre el posible tesoro.
En 2018, Daniel Pantov, director del museo de Primorsko, realizó un análisis con un georadar. Encontró una anomalía a 18 metros de profundidad y algunos cuartos y corredores escondidos.
A pesar de toda la información y teorías al respecto, al día de hoy no se han realizado más búsquedas y el sitio es conocido como la 'Cueva de Bastet'.
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SOFÍA ARIAS MARTÍNEZ
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
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