Hombre pensó que tenía una lesión por ejercicio, pero fue diagnosticado con cáncer de intestino en etapa 3: el síntoma atípico que tuvo

Andy Spary, un carpintero británico, de 39 años, y corredor aficionado, creyó que el intenso dolor que sentía en su glúteo izquierdo era consecuencia de una caída que sufrió mientras patinaba. 

Durante semanas, esa molestia persistente fue atribuida a una lesión deportiva, sin que se sospechara una causa más grave.

La sensación, que Andy describió como “una quemazón muy intensa”, no parecía encajar con los síntomas comunes del cáncer de intestino, lo que llevó a los médicos a considerar una lesión muscular. 

Sin embargo, tras realizarle estudios más detallados, como una resonancia magnética y una biopsia, el diagnóstico cambió por completo.

Los resultados confirmaron la presencia de un tumor en el intestino, que ya se había diseminado a los ganglios linfáticos cercanos, según reportó el medio Daily Mail. La noticia fue devastadora: cáncer de intestino en etapa tres.

Los especialistas sospechan que el cáncer podría estar vinculado con la enfermedad de Crohn, una afección inflamatoria que Andy ya padecía y que puede causar un crecimiento anormal de células en el tracto digestivo.

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“El tumor se ha ramificado desde mi intestino hasta el glúteo y se está extendiendo”, explicó Andy, quien está casado con Amy, de 35 años. “Nos enfocamos en lo positivo, eso ayuda, tomándolo como que es tratable y puedo vencerlo”, agregó.

En julio del año pasado, los médicos decidieron colocarle una estoma, procedimiento que implica llevar una parte del intestino a la superficie del abdomen para conectar una bolsa recolectora de desechos. 

Meses más tarde, en septiembre, comenzó con quimioterapia y radioterapia, aunque los resultados iniciales no fueron los esperados.

Ante esto, el 21 de mayo fue sometido a una segunda intervención quirúrgica. En esta operación, los médicos retiraron la parte restante del intestino, lo que quedaba del tumor y una sección del glúteo comprometido. 

Luego, un cirujano plástico utilizó tejido del propio cuerpo para reconstruirle la zona pélvica. “Un cirujano quita el tumor y el plástico arregla todo. Nuevo trasero, nuevo yo, todo bien”, expresó Andy con humor.

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Además del avance frente al cáncer, esta intervención quirúrgica podría traer un beneficio adicional: aliviar los síntomas de la enfermedad de Crohn, ya que el área más afectada fue retirada durante la cirugía.

Aunque los médicos creen que el procedimiento fue exitoso, Andy deberá esperar al menos un mes para realizarse una tomografía que determine si ya está libre de cáncer. “Mantenerme en forma y saludable ha sido mi mejor arma”, afirmó.

Con ese espíritu, Andy planea correr la maratón de Londres en 2026 para recaudar fondos para la organización benéfica Trekstok. 

Actualmente, continúa recuperándose en el hospital, donde ya logró sentarse y dar sus primeros pasos. “Tener como meta correr mi primera maratón el próximo año, con la bolsa y todo, es lo que me motiva a seguir adelante”, dijo.

“Después de todo esto, volveré a estar de pie, más fuerte y más sano, sin Crohn y sin cáncer. Todo resuelto”, concluyó.

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De acuerdo con MedlinePlus, el cáncer de intestino suele referirse al cáncer colorrectal, que comienza en el colon o en el recto. Por lo general, se origina a partir de pólipos benignos que, con el tiempo, pueden transformarse en tumores malignos. Aunque es uno de los cánceres más comunes, suele detectarse con mayor frecuencia en personas mayores de 50 años.

En sus etapas iniciales, esta enfermedad puede no presentar síntomas. Cuando aparecen, incluyen cambios en los hábitos intestinales (como diarrea o estreñimiento), presencia de sangre en las heces, dolor abdominal, pérdida de peso sin explicación aparente y fatiga persistente. La detección temprana resulta fundamental, ya que el cáncer colorrectal es tratable si se identifica a tiempo.

Los especialistas recomiendan realizar pruebas regulares de detección, como la colonoscopia, a partir de los 45 o 50 años, o incluso antes si hay antecedentes familiares. También sugieren llevar una dieta rica en frutas, verduras y cereales integrales, limitar las carnes rojas y procesadas, mantenerse físicamente activo, y evitar el tabaco y el consumo excesivo de alcohol como medidas preventivas.

Jorge Villanes

El Comercio (Perú) / GDA.