La actuación de un grupo de pescadores del corregimiento de
Tasajera contra la manatí,
Julieta, a la que capturaron y golpearon hasta quitarle la vida, ha generado indignación y rechazo en todo el país.
Videos y testimonios recogidos por las autoridades ambientales en la zona descartaron la justificación que dieron los responsables, quienes habían asegurado que atacaron al mamífero porque lo confundieron con un caimán.
El vicepresidente de la Confederación de Pescadores del Caribe Colombiano, Enrique Maldonado, en representación del gremio, pidió perdón por el comportamiento irracional que le costó la vida a esta especie en vía de extinción.
"A nombre de toda la comunidad pesquera de Puebloviejo y Tasajera, hoy me arrodillo ante el mundo para pedir perdón”, manifestó Maldonado, uno de los líderes de pescadores más reconocidos de Tasajera.
Al enterarse de lo que sucedió, el vocero de esta comunidad pesquera dijo que “sentí pena y vergüenza”.
Según Maldonado, hay evidencias claras de la persecución que le hicieron al animal mientras intentaba salvarse.
Lo acorralaron y lo mataron de manera cruel y cobarde
“Lo acorralaron y lo mataron de manera cruel y cobarde”, anotó Enrique Maldonado.
El representante de los pescadores dijo que por este hecho cometido por unos pocos, ahora todo el sector está siendo señalado y condenado.
Al respecto dijo que existe un compromiso ambiental que han asumido voluntariamente aquellos que se dedican a la actividad de la pesca en el mar y la Ciénaga Grande de esta jurisdicción.
“Tenemos claro que las especies protegidas o en vía de extinción deben ser rescatadas y liberadas. Siempre lo hemos hecho con delfines, tortugas y otras especies. A estas personas les faltó sentido de pertenencia”, sostuvo.
Finalmente, detalló que fueron alrededor de 50 pescadores los que participaron en la persecución de Julieta desde el Puente de La Barra hasta Pueblo Viejo, allí la capturaron y atacaron con palos y machetes hasta llevarla a la muerte.
Maldonado pidió a las autoridades llegar hasta el fondo de las investigaciones y que respondan quienes cometieron este acto despiadado.
Roger Urieles
Para EL TIEMPO
Santa Marta
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