Los desafíos de la movilidad en Cali: hay más satisfacción en usar motos que el MIO

El 86 % de los caleños que usan la moto están satisfechos con ese medio de transporte. También lo está el 80 % de aquellos que usan carro particular, al igual que el 77 % de los que usan bicicleta y 56 de los que andan a pie.

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En 2022, el porcentaje de estos vehículos en circulación alcanzó el 45,6 % del total matriculados, cifra que representó un incremento en relación con 2021.

Es así que en ese último año, hubo un aumento del 23,7 % del número de pasajeros transportados en transporte público tradicional. Mientras que el número de vehículos del MIO activos se redujo 1,6 % frente al 2021.

Según el tipo de vehículo, disminuyó la cantidad de buses padrones y complementarios disponibles (-2,3 %), alimentadores (-0,4 %) y troncales (-1,5 %). 

Este es parte del panorama que presenta desde hoy el programa Cali Cómo Vamos, en el informe ‘Cómo vamos en movilidad’. Se trata de los resultados, tras una encuesta a 1.500 ciudadanos, del 2 de febrero al 18 de marzo de este año.

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El documento se lanza por el canal YouTube de EL TIEMPO, a las 10:00 a. m. de este jueves 29 de junio. Se indica que de los 1.013 vehículos del MIO activos, en 2022, 600 circularon por la ciudad (59,3 %).

Según el tipo, los vehículos troncales presentaron el menor porcentaje de vehículos en circulación (49,2 %), seguido de alimentadores (52,4 %) y padrones y complementarios (63,9 %). En relación con otras ciudades del país que cuentan con sistema masivo de transporte, en 2022, Cali fue la segunda con menor porcentaje de vehículos en circulación, solo superando a Bucaramanga (28,8 %).

El servicio del MIO es tan preocupante, teniendo en cuenta lo que respondieron los encuestados.

Según el informe, 40 de cada 100 caleños consideran que el masivo “presta un peor servicio del que prestan los buses, busetas y colectivos del transporte público tradicional de la ciudad”.

El director de Cali Cómo Vamos, Marvin Mendoza, dijo que “en relación con los diferentes aspectos del MIO, de cada 100 caleños 65 estaban insatisfechos con la cantidad de gente dentro del bus; 63 con la seguridad ciudadana dentro de los buses y estaciones; 60 con la cantidad de gente en las estaciones; 56 con la frecuencia de los buses; 50 con el tiempo de viaje en recorridos; 49 con venta y recarga de la tarjeta dentro y fuera del sistema, y 48 con la cobertura de las rutas.

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El informe también presenta panorama sobre los accidentes de tránsito en la capital del Valle del Cauca. 

El documento señala que en 2022 se registraron 9.586 accidentes de tránsito en Cali, una reducción de 12,8 % frente a 2021. 

Además, del total de accidentes de tránsito, 5.463 (57 %) dejaron como resultado solo daños materiales.

Hubo 4,123 accidentes con lesiones en Cali (43 %). En promedio hubo 27 accidentes diarios en Cali, en 2022.

"En relación con los diferentes aspectos del MIO, de cada 100 caleños 65 estaban insatisfechos con la cantidad de gente dentro del bus, 63 con la seguridad ciudadana dentro de los buses y estaciones, 60 con la cantidad de gente en las estaciones, 56 con la frecuencia de los buses, 50 con el tiempo de viaje en los recorridos, 49 con venta y Recarga de la tarjeta dentro y fuera del Sistema, 48 con la cobertura de las rutas", dijo el docente Mendoza.

En cuanto a la percepción de los caleños en relación con el comportamiento de las personas en dentro del sistema MIO, de cada 100 caleños:

• 46 consideran que hay muy mal comportamiento en relación con la solidaridad con personas que requieren ayuda para el uso del sistema o que tengan prioridad en el servicio (embarazadas, niños, adultos mayores y personas con limitaciones físicas)

• 48 consideran que hay mal comportamiento con el cuidado para mantener el aseo y el buen estado de las estaciones y buses del MIO

• 53 consideran que hay mal comportamiento con la solidaridad para evitar abusos físicos y/o verbales contra mujeres y niños dentro de la estación y del bus.

• 57 consideran que hay mal comportamiento para hacer fila para ingresar y salir de la estación y del bus.

• 61 consideran que hay mal comportamiento frente al respeto con las normas de tránsito en las vías del MIO (troncales, pretroncales y carril Solo bus).

El director de Cali Cómo Vamos enfatizó en que así como la alcaldía de la ciudad tiene responsabilidad en cuanto a buscar salidas para el MIO, al igual que los operadores del sistema, la ciudadanía no puede olvidar que también debe contribuir en esas soluciones. 

Añadió que esa contribución va de la mano con ser ciudadanos más cívicos, de más cultura en no arrojar basuras al MIO, en cuidarlo, en formar filas de manera organizada sin atropellarse los unos a los otros. 

Con el comportamiento se motivan más pasajeros a usar el sistema de transporte público, con el fin de que la población no se sienta llamada a buscar otros medios de transporte, como está ocurriendo, medios particulares, entre ellos, las motocicletas y los carros, aumentando, como está sucediendo el parque automotor. 

Martha Gutiérrez Echeverri, secretaria general de la Asociación Latinoamericana de Sistemas Integrados para la Movilidad Urbana Sustentable (Simus) hizo un análisis sobre los resultados del informe y la encuesta de percepción de Cali Cómo Vamos 'Cómo vamos en movilidad'.

Si bien se raja y, está en semáforo en rojo frente a los resultados asociados a factores de calidad en la prestación del servicio, ya que más del 50% de los caleños encuestados, reportan estar insatisfechos por la demora en la frecuencia de los buses, largos tiempos de viaje cercanos a 55 minutos frente a 40 de un trayecto habitual; reclaman más cobertura de rutas, inseguridad y alta congestión tanto en buses como en infraestructura. Llama la atención y resulta paradójico a la vez que, de cada 100 caleños, 29 usan como modo principal el MIO, 9 se movilizan a pie, 8 usan bicicleta, 6 usan el transporte público tradicional y 4 usan taxis, quiere decir que en total 56 optan por movilizarse en transporte público y en modos sustentables como la caminata y la bicicleta frente a 39 que optan por desplazarse, en moto 23, en carro particular 12 y 4 a través de transporte informal.

Lo que significa que más del 50% de los caleños optan para hacer sus desplazamientos en la Red de Transporte Público que ofrece la ciudad, aunque no se reporta al Cable MIO, es muy positivo y puede estar atribuido a factores como:

1. Menor costo del pasaje frente a lo que cuesta moverse a través del servicio de plataformas o del transporte informal o ilegal que es utilizado para trayectos intermunicipales que puede resultar más costosos.

2. Mayor conectividad con la ciudad en una red dotada con tecnología, WIFI, y cámaras

3. Mejoras frente a la información al a través de la APPS, que les permite información en tiempo real para tomar decisiones oportunas.

Sin embargo, 23 de cada 100 caleños optan por el uso de la moto. Es una realidad el Mototaxismo que viene creciendo de manera desmedida en las ciudades de América Latina y el análisis lo asociamos con siniestros viales por tener una relación causa/efecto directa.

En ese orden de ideas, Se estima que en la región hay más de 35 millones de motocicletas registradas, siendo Brasil el país de la región con más motos por habitantes, con un 29 %, seguido de Argentina (24 %), Colombia (23 % actualmente, son + de 10 de motos registradas en el RUNT), Bolivia (22%), Nicaragua (17 %) y Venezuela (16 %); este fenómeno debido a varios factores:

1. Falta de una política pública; o regulaciones temporales con medidas contingentes por temas de seguridad y orden público.

2. Alternativa de movilidad, debido a la facilidad de por bajos costos, la flexibilidad, la agilidad en el recorrido, la facilidad de estacionamiento, bajo consumo de combustible y el fácil a ella.

3. U malo o ineficiente sistema de T.P

4. Alternativa de empleo

En Cali, cerca de 1.900 motorratones, prestan sus servicios en 72 puntos en toda la ciudad, principalmente en zonas alejadas y

de ladera.

Entre enero de 2011 y diciembre de 2021, más de 33.000 s de moto perdieron la vida en Colombia, Según datos de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, siendo Cali la segunda ciudad en el país con la mayor cantidad de muertes por siniestros viales.

Solo a mayo de 2023 ya iban en 102 muertes. Al respecto, la encuesta indica que para el 2022, a pesar de la reducción en el número de accidentes de tránsito, la tasa de lesionados fue de 43 de cada 100 accidentes, cifra superior a la registrada para el año 2021. Y es justamente la causa de mortalidad, la razón por la cual en Colombia no son consideradas como un medio de Transporte Público sino un transporte irregular como lo define el Consejo de Estado o ilegal, que requiere urgente regulación a través de políticas claras y medidas contundentes que definan:

De una parte: Condiciones técnicas de operación, de circulación o restricción, analizar cuáles son los costos y beneficios personales y sociales del uso de la motocicleta en contextos locales, para entender mejor los incentivos que pueden considerarse, su impacto ambiental y cargos impositivos,

De otra parte, regular los dos aspectos asociados a su uso:1. Trabajo - movilidad, con el deber de ofrecer condiciones sanas y de bienestar para sus conductores, parrilleros y frente a los demás actores viales 2. Seguridad vial, desarrollar planes estratégicos de seguridad vial para motocicletas, mejorar la capacitación y formación del conductor así como entender el impacto del otorgamiento de licencias puede mejorar la seguridad vial, al contemplar regulaciones especiales para conductores novatos de motocicleta que imponga restricciones que se reducen gradualmente con la experiencia de manejo y desarrollar manuales de diseño y mantenimiento de vías y calles seguras principales como secundarias y barriales que incluyan motos y bicicletas, como un desafío a implementar.

Otro tema interesante que nos dan los resultados de la encuesta, es respecto del incremento del parque automotor de vehículos y el número de vehículos activos del Transporte Público Masivo Vs. Colectivo de Cali. Para el primer caso, el incremento fue de 774.793 vehículos para el 2022, muestra que por cada 1.000 automotores registrados en la ciudad: 641 eran automóviles particulares, 303 eran motocicletas, 42 eran vehículos de servicio público; esto sin duda alguna asociados a los impactos pospandemia que llevaron al incremento del parque automotor de motos y carros privados como un fenómeno a nivel mundial asociado al temor infundado de contagio en el TP, sin evidencia científica que así lo respaldara.

Ahora bien, frente al número de vehículos activos del MIO respecto del Transporte Colectivo; siendo para el caso del MIO una reducción de 1.013 vehículos del MIO a 600 circulando por la ciudad frente a un incremento de vehículos del transporte Colectivo de 919 a 939; está referido a los daños cercanos al 90 % que sufrió el Sistema MIO con ocasión del estallido social vivido durante los meses de mayo – junio del 2021, resultó siendo uno de los Sistemas Masivo de Colombia más afectado en toda su infraestructura y flota. Esto implicó cubrir una operación contingente con los demás modos de transporte público, jugando un rol muy importante el TPC.

Esto lo que permite ver que el costo de oportunidad es alto. Repensar y rediseñar el Sistema Integrado MIO, bajo modelos de integración multimodal interoperables, ya que actualmente el Sistema Integrado del MIO, carece de elementos de integración institucional, tarifaria, operacional y física con otros Subsistemas como el Transporte Público Colectivo, el transporte de laderas conocidas como Gualas, los buses intermunicipales que conectan la ciudad con los municipios dormitorio, los modos no motorizados y férreos como el Tren de Cercanías ya aprobado por el actual Plan de Desarrollo.

Solo a partir de un sistema de transporte público atractivo y conveniente se puede competir contra las opciones privadas de transporte, siendo capaces de RENTABILIZAR RUTAS CADA VEZ MENOS EFICIENTES y esto se logra a través de la integración multimodal entre las diferentes soluciones de movilidad, destacando las bondades y ventajas de cada modo, para ofrecer un servicio completo puerta a puerta de calidad e inclusivo, no parcial, porque de lo contrario los propietarios no dejaran su carro particular.

Para esto, la importancia de la concurrencia de cada operador de los Subsistemas, debe llevar a cabo un rol específico, intentando aprovechar la experiencia en su sector o ámbito geográfico para gestionar la parte de la red asignada, con el mayor grado de eficiencia y calidad.

Será clave la experiencia y participación activa y decidida de los transportadores del Colectivo que son quienes realmente conocen las particularidades en todos sus componentes del negocio que demostraron en los momentos de crisis vividos, la solvencia en la prestación del servicio.

Lograr la complementariedad de todos y cada uno de los subsistemas, la homogeneidad en la gestión de la calidad y la fiabilidad en la coordinación entre todos los distintos operadores, para permitir cuajar el concepto de sistema único, integrado e interoperable será clave y decisivo, pues no se concibe bajo conceptos erróneos de competencia, fracaso o eliminación de un sistema u otro.

Finalmente, este tipo de estructuras de Red jerarquizada para ser eficiente y eficaz, requiere de una institucionalidad con capacidad estratégica, táctica y operacional que coordine las distintas partes que la conforman y garantizar la correcta articulación de entre los servicios de orden urbano y metropolitano. Por eso en hora buena, la creación de la autoridad Regional de Transporte.

¡Con todas las bases legales, normativas, estudios y diagnósticos puestas en mesa que tiene Cali, el tremendo desafío que hay por delante, es hacer, ejecutar, implementar y contar con buenos mecanismos de seguimiento, monitoreo control para ir ajustando en el proceso lo que corresponda!

CAROLINA BOHÓRQUEZ

CORRESPONSAL DE EL TIEMPO

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